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En Teruel

Un cazador muere tras recibir un tiro accidental en el abdomen

Este jueves 15 de agosto, un cazador ha muerto en Jorcas, provincia de Teruel, tras recibir en el abdomen el disparo accidental de un compañero cuando estaba desmontando su escopeta.
cazador muerto Teruel El disparo accidental vino del arma de su compañero, cuando la estaba desmontando.

El suceso se producía poco antes de las diez de la mañana. Miguel G.E., el fallecido, y su amigo A.C.P., salieron a primero hora del pasado a jueves al paraje de ‘Las Cerradas’ a disfrutar de una jornada de caza, aprovechando el arranque de la media veda.

 

El aficionado herido era natural de la vecina localidad de Camarillas y se había trasladado a Jorcas con sus perros a cazar codornices junto a un compañero. Tras finalizar la jornada, uno de ellos estaba desmontando su arma cuando, de manera fortuita, esta se disparó, alcanzando a Miguel en el abdomen. El tiro accidental fue casi a bocajarro, pues la víctima se encontraba a unos tres metros, según informan algunos medios.

 

De inmediato, se dio aviso a los Servicios de Emergencias del 112. Hasta el lugar del accidente se trasladaron una ambulancia y un helicóptero, que atendieron al herido. A pesar de los esfuerzos, ninguno de los sanitarios pudo hacer nada por salvarle la vida, y terminó muriendo poco después.

 

cazador muerto Teruel

 

Alrededor de las tres de la tarde, se produjo el levantamiento del cadáver, que fue trasladado a Teruel para la realización de la autopsia. Por su parte, el autor del disparo accidental, de 46 años, fue interrogado y, según informan los medios aragoneses, permanece detenido en las dependencias de la Guardia Civil por un presunto delito de homicidio imprudente grave. Se encuentra a la espera de pasar a disposición judicial. 
 

 

Consternación en el pueblo

 

Según ha explicado el alcalde de Jorcas, Román Izquierdo, la noticia ha sentado como un jarro de agua fría en el municipio. Justo estos días, se celebran las fiestas patronales en el pueblo. A raíz del suceso, se han suspendido todos los actos en señal de duelo. En Jorcas, durante el invierno viven unos 15 habitantes. Pero durante la época estival, el pueblo sube de población hasta unas 300 personas aproximadamente. Todas ellas, en palabras de Izquierdo, están “consternadas”.

 

El regidor ha comentado también que, en el momento del accidente, Miguel no portaba su arma. Además, ambos cazadores eran amigos. En cuanto al fallecido, era soltero y vivía de forma continua en el pueblo vecino de Camarillas. Se dedicaba a la ganadería.