Aquí tienes los 'puntos calientes' de la nueva (y restrictiva) legislación de armas en Alemania

Desafortunadas novedades para los propietarios de armas en Alemania. Recientemente, el gobierno estatal presentó en el Parlamento un borrador de enmienda, para su posterior aprobación, que dará forma a la nueva Ley de Armas. Unos hechos que se producen con motivo de la trasposición de la Directiva Europea en esta materia.
En su momento, el Ejecutivo alemán aseguró que la propuesta recogería los requisitos mínimos incluidos en la normativa comunitaria. Pero ha resultado todo lo contrario. El texto, que se encuentra en aras de aprobación, contiene más restricciones de las esperadas. Hace justo un año se filtró el borrador, causando una importante polémica. Los afectados, en claro tono disconforme, han bautizado esta normativa como “la ley de los monos”.
En otros países de la Unión Europea, tras conocerse esta trasposición de la Directiva Comunitaria, se ha instalado cierta inquietud por las sorpresas que puedan traer las respectivas leyes nacionales de armas. A continuación pasamos a detallar las enmiendas más significativas que afectan a los cazadores, tiradores y armeros alemanes, y a las que hemos tenido acceso a través de Katja Triebel, responsable de estudios de Firearms United.
Prueba de capacitación
Tras la adquisición inicial de una licencia de armas, la prueba psicotécnica sólo debe presentarse una vez después de cinco años, y otra vez tras diez años. Después de esto, la prueba de pertenencia a un club de tiro es suficiente.
Protección de la Constitución
Según detalla la enmienda concreta, “la mera pertenencia a una asociación inconstitucional -aunque la asociación aún no esté prohibida- tendrá como consecuencia la exclusión del permiso para adquirir o poseer un arma”. Además, las autoridades responsables de las armas llevarán a cabo controles de fiabilidad periódicos con la Oficina de Protección de la Constitución.
Zonas de prohibición de uso de armas
Los países pueden establecer zonas en las que se prohíba el porte de armas y cuchillos con una longitud de hoja superior a cuatro centímetros. La condición es que “los hechos justifiquen la suposición de que la prohibición o restricción es necesaria para la prevención de amenazas a la seguridad pública”.
Prohibición de los cargadores de gran tamaño
Este es, sin duda, una de las enmiendas más polémicas y que más ampollas ha levantado en el colectivo armero. Desde la aprobación del texto, los cargadores de gran capacidad (más de 10 cartuchos para armas de fuego largas y más de 20 cartuchos para armas cortas) estarán clasificados como “artículos prohibidos”. Asimismo, los propietarios de esos cargadores pueden seguir utilizándolos, siempre y cuando se lo comuniquen a las autoridades competentes.
Visión nocturna
Otro punto polémico y restrictivo para el colectivo venatorio. La tecnología de visión nocturna no puede seguir siendo utilizada con fines de caza. Sin embargo, los estados federales pueden desviarse de esta prohibición general, por ejemplo, para combatir la peste porcina africana en su área.
Marcaje
Para poder garantizar la completa trazabilidad de las armas de fuego hasta su fabricación, en el futuro todas las piezas esenciales deberán ser marcadas e inscritas en el Registro Nacional de Armas de Fuego. Esto no se aplicará, en cambio, a las armas ya existentes.
Silenciadores
En el futuro se permitirá a los cazadores adquirir y poseer silenciadores, “que son importantes para la protección del oído”, sin la necesidad de obtener permiso especial.