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Y un par de vídeos con tiros a sarrios, isards o gamuzas en las montañas

¿Cuáles son los mejores calibres para cazar rebecos?

Una vez tengamos claro si nuestro rifle para cazar rebecos será uno de cerrojo o un monotiro, por su mayor precisión y ligereza, tendremos que decidir otro importante punto: el calibre del mismo.
Mejores_Calibres_Rebeco_G Captura de un vídeo de caza de alta montaña (mayoritariamente rebecos) de la compañía francesa Ovini Expeditions.

En el mundo de la balística no hay fórmulas secretas ni proyectiles mágicos. Para abatir un animal debéis tener claro que el mejor calibre es colocar la bala en el sitio. Con la primera lección ya aprendida, ahora nos toca analizar nuestro objetivo, el rebeco, con el propósito de encontrar un cartucho proporcional a su tamaño y vitalidad.

El rebeco, sarrio, isard o gamuza es un bóvido cuyo peso puede llegar a los 35 kilos y la altura a la cruz, cómo máximo, a los 80 centímetros. Ante este tamaño, nada grande, por cierto, y la vitalidad similar a la de una cabra, es recomendable usar cartuchos de potencia media con proyectiles entre los seis y siete milímetros de diámetro y que dispongan de una energía entre 1.500 y 3.000 julios a los 100 metros. Un detalle a tener en cuenta es que en las Reservas de Caza el calibre mínimo que se exige a los cazadores es el seis milímetros.

Bastantes candidatos

En el mercado encontramos un buen abanico de cartuchos que cumplen con estas premisas, algunos más populares que otros dependiendo de los años y de las modas.

  • Americanos. Existen cartuchos de procedencia americana que hoy en día podemos decir que han conquistado el mundo, caso del pequeño .243 Winchester, el clásico .270 o el todoterreno 7 mm. Remington Magnum, hasta llegar a los más radicales y eficientes, como el .270 Winchester Short Magnum.
  • Europeos. Encontramos también clásicos cartuchos centroeuropeos que, poco a poco, van quedándose en retaguardia por decirlo de forma sutil y van perdiendo popularidad: 6,5x57, 6,5x65, 6,5x68, 7x57, 7x64, etc.
  • “Esotéricos”. Por último, hay algunos cartuchos que a mí me gusta llamar “esotéricos”, como pueden ser el 6x62 Frères, .257 Weatherby Magnum o 6,5x284, cartuchos que combinan su grandes propiedades balísticas con la dificultad que supone encontrar munición comercial de los mismos, teniendo que recurrir en el mejor de los casos a la recarga de cartuchería.

A la hora de la verdad

Debemos tener en cuenta que todos ellos son perfectos para dar caza al rebeco de forma ética y eficiente, lo que los ingleses llaman “no dramas and clean kills”, o sea, una muerte limpia y sin sufrimiento.

Estos cartuchos, además, son ‘agradecidos’ de disparar, ya que tienen poco retroceso, lo que favorece que los cazadores se sientan muy cómodos cuando los disparan porque pueden estar muy relajados. Y al no estar pendientes del culatazo que les va a pegar su rifle, desaparecen incluso los gatillazos, mejorando así su puntería. Además, estos cartuchos pueden alardear también de tener una buena rasante, cosa que es de agradecer a la hora de realizar disparos largos.

¿Con cuál nos quedamos?

La respuesta es fácil: primero tendremos que ver con qué calibres está disponible ese rifle que vamos a comprar, a continuación ver su disponibilidad y, según esto, decidimos. Las armas que llegan a nuestro mercado no suelen ser todas las que los fabricantes ofrecen en su catálogo.

En estos cartuchos para la caza del rebeco podremos emplear diversos tipos de proyectiles con pesos que oscilarán entre los 100 y 150 grains. Resulta muy importante la elección del tipo de proyectil, y para la caza del rebeco podremos usar desde los diseños clásicos de punta blanda con plomo o plástico (fragmentación), a los más modernos de doble núcleo (fragmentación controlada) o incluso los proyectiles monolíticos de cobre (alta expansión), con los cuales, al no tener plomo, el aprovechamiento de la carne es máximo y totalmente seguro. Lo que nunca tenéis que usar para la caza del rebeco son proyectiles blindados.

Un dato a tener en cuenta es que utilizando los proyectiles monolíticos de cobre en las Reservas de Caza, tendremos la posibilidad de realizar hasta cinco disparos, en lugar de los tres reglamentarios que tenemos si utilizamos munición con plomo.

Para finalizar, a mero título informativo y sin querer dogmatizar mucho en el asunto, decir que algunos cartuchos de caza mayor tan populares como el potente .300 Winchester Magnum o incluso el todoterreno .30-06, a la hora de cazar el rebeco podríamos decir que son excesivos, pues disponen de mucha energía que acabará destrozando nuestra pieza. En caso de que no haya otro remedio y tengamos que usar alguno de estos cartuchos para cobrar nuestro trofeo, intentaremos por lo menos emplear proyectiles de punta blanda, lo más ligeros posible.

(Texto y fotos: Ramón Fitó).