Este vídeo muestra la realidad del conflicto del lobo en España

El lobo ibérico ha pasado de ser una especie en peligro de extinción con apenas 200 ejemplares en el norte de España, a expandirse y contar con mas de 2.500 ejemplares distribuidos por todo el norte y centro de la Península. La población de lobos de España, es en efecto, la segunda región europea con mayor poblacion de lobo, gozando la especie de una excelente salud.
La situación de la especie hace incomprensible el intento del Gobierno español de proteger y blindar al lobo, incluyendolo en el listado de especies vulnerables, hecho rechazado por la comunidad cinetífica y por las comunidades autonomas princinlpales responsables del crecimiento del lobo. Desde Fundación Artemisan, han recorrido gran número de comarcas por las que campean los lobos, para escuchar la voz y la experiencia de aquellos que están mas relacionados con la especie y su problematica. ¿Es posible la convivencia del lobo y el hombre? Es la gran cuestión de estos días.
Sí, sí es posible, pero requiere de algo en lo que coinciden biólogos como Juan Delibes o Luis Llaneza, los expertos coordinadores del Censo Nacional del lobo como Mario Sáenz de Buruaga, naturalistas como José Enrique Díaz o la hija del aclamado Félix Rodríguez de la Fuente, Odile, o José Ángel Arranz, director general de Medio Natural de la Junta de Castilla y León: CONSENSO.
En la toma de decisiones, hasta ahora se ha excluido a todos aquellos agentes y personas que conviven con el lobo ibérico a diario y que por ende, son los principales afectados. Por eso, referentes como los citados en el párrafo anterior, apelan al consenso entre los organismos de gestión, cazadores, conservacionistas, y ganaderos, para seguir velando por el bienestar y el futuro del lobo ibérico.
Un futuro para el que el modelo de gestión cinegética, ha demostrado ser un modelo de éxito según las palabras del propio José Ángel Arranz y los datos empíricos contrastados por los censos oficiales de la especie. De hecho, las zonas de España “y posiblemente del mundo, con los datos que hoy tenemos”, con mayores densidades de lobo, son las zonas cinegéticas. La paradoja de que la caza, es conservación, es una realidad empírica ante la que las Administraciones tienen que abrir los ojos.